SER CRISTIANO ES SER REBELDE A LAS INJUSTICIAS

por javier sicilia

Exhortación publicada en 1973 por nuestra preparatoriana revista LUMEN.
Las fotos son de Internet, pero a la de Javier le hice un efecto de iluminación y filtrado.   Javier OTK

"Cristiano, ¿Qué has hecho con dos mil años de cristianismo?"

d.a. siquieiros.

"Dad vuestros anillos y vuestras pulseras, no sea que mañana os puedan costar vuestros brazos."

hélder cámara.

El transcurso del tiempo nos ha enseñado que nuestro cristianismo (después del paso de Cristo) es entendido, no como apelativo de la verdadera esencia expresada en este, sino como apelativo de una simple tradición.

La Iglesia, y por lo tanto nosotros como miembros activos de ella, hemos configurado un cristianismo de acuerdo a nuestra conciencia burguesa, haciendo de éste un reflejo del Estado, de las técnicas de producción y por consiguiente de las técnicas de opresión y de explotación a las clases con escasos recursos económicos. Al ser participes de dichas técnicas, nosotros como "cristianos" estamos siendo los principales destructores de lo que predicamos ser, cayendo en la esencia puramente ritual, con la cual nos hemos mistificado en una forma absurda.

El Cristianismo, recordemos, es vida, y no una serie de preceptos con características dogmáticas en las que nos hemos enclaustrado por tanto tiempo, haciendo más marcado nuestro olvido, desarrollando el hambre y la división de clases.

Si olvidamos que el ente como ser, tiene tanto necesidades materiales como espirituales, y nos dejamos ir por el misticismo ritual, caemos en el sentimiento del cristianismo burgués, relegando nuestra doctrina (que al ser social, es espiritual) a un segundo término, implicando la destrucción de un status, de un sistema que ha degradado las clases oprimidas para mantenernos en nuestro nivel de vida económico.

Cristo dijo, y no lo hemos comprendido: "Cuándo hagáis una comida invitad a los cojos, a los mendigos y a los ciegos, para que podáis recibir el premio de los justos. Y si tenéis dos túnicas, regala una". ¿Qué hemos hecho de esta doctrina, de nuestro verdadero evangelio, el que buscó Cristo engendrar en cada uno de nosotros?

Son pocos los cristianos que han reflexionado ante este olvido, volviendo a resurgir al Cristo de los pobres. Es necesario escuchar el grito cristiano de las obras del padre Camilo Torres, haciendo oposición a las autoridades que habían escupido el rostro de Cristo, al oprimir a un pueblo, a una clase proletaria. Es necesario escuchar el grito del pobre, en las palabras de Hélder Cámara y Méndez Arceo. Es necesario volver nuestro rostro a Cristo, buscar la justicia del reino,

porque Cristianismo implica el compromiso social, que como tal lleva impreso en sus palabras,

porque ser cristiano es ser rebelde a las injusticias.

"Amaos los unos a los otros".